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Los dos mandatarios buscan los caminos para gestionar «de forma adecuada» la compleja relación entre China y Estados Unidos.
La cumbre del G20 que se lleva a cabo en la isla de Bali, en Indonesia, comenzó este lunes con el encuentro más esperado. Dos de los mandatarios que más atención atraen se reunieron y se estrecharon las manos en medio de un clima de tensión en aumento, producto de los movimientos geopolíticos de Estados Unidos y China.
Xi Jinping, líder chino; y Joe Biden, mandatario estadounidense, se vieron cara a cara con banderas de ambos países de fondo. Los presidentes de China y Estados Unidos abrieron su reunión adelantando sus coincidencias en la imperiosa necesidad de «encontrar la dirección correcta» para evitar un «conflicto».
Biden le dijo a su homólogo chino que «no hay sustituto» para las reuniones cara a cara y que estaba comprometido a «gestionar las diferencias para evitar que la competencia se convierta en conflicto».
Por su parte, Xi Jinping instó a «encontrar la dirección correcta» para las relaciones bilaterales. «El mundo está una encrucijada» y «espera que China y Estados Unidos gestionen de forma adecuada su relación», añadió.
